La paz es un estado de bienestar, tranquilidad, estabilidad y seguridad, que es opuesto a la guerra y tiene una connotación positiva. Es un estado de armonía que está libre de guerras, conflictos y contratiempos.
Mantener la paz implica la práctica de valores como la tolerancia, la justicia y una apertura al diálogo.
La paz es una cualidad deseable universalmente, es valorada por todas las sociedades y culturas, a nivel de los Estados y países y también en los hogares, en las relaciones interpersonales y en el interior de cada individuo.
Mantener la paz implica la práctica de valores como la tolerancia, la justicia y una apertura al diálogo.
El valor de la paz
La paz como valor humano refiere a la capacidad de un individuo de alcanzar una sensación interna de tranquilidad y aceptación. Este tipo de paz se denomina “paz interior” y es la sensación de armonía que experimenta un individuo consigo mismo. Algunos ejes que ayudan a conseguir este tipo de paz son: aprender a lidiar con los sentimientos negativos o conflictos y la toma de decisiones libres.
Muchos cultos promueven las prácticas de reflexión y meditación para alcanzar el estado de paz al que aspiran los individuos.
Además, la paz es un valor que se busca conseguir en toda relación o ámbito social, debido a que permite el fortalecimiento de los vínculos y el desarrollo de sociedades más justas y armónicas. Un entorno social equilibrado se logra buscando la resolución de los conflictos de manera pacífica y el respeto por los derechos humanos fundamentales.
Importancia de la paz
La paz es uno de los valores fundamentales en las relaciones inter e intrapersonales, que puede entenderse en distintos niveles o ámbitos y que siempre supone la búsqueda de un equilibrio y el respeto por los derechos humanos.
Es por medio de la paz que los individuos pueden sentirse a gusto y en armonía consigo mismos y con su entorno social. Es un acuerdo tácito que permite a todos los individuos realizar sus actividades sin interferencias y prevenir la violencia. Además, busca fortalecer los vínculos sociales y que primen los valores del respeto, la justicia y la aceptación.
En el plano de las relaciones internacionales es importante que prime la paz y que los conflictos de intereses entre las partes puedan resolverse con acuerdos o tratados, debido a que los conflictos armados son socialmente nocivos.